“El deseo de conocer dirigido a lo general se llama Wissbergier, deseo de saber; a lo aislado, curiosidad. Los muchachos demuestran lo primero; las niñas lo segundo, pero en un grado estupendo, y a menudo con una ingenuidad repugnante. Ya en esto se ve la propia inclinación del género femenino por el detalle y su insensibilidad por lo general”. Arthur Schopenhauer